martes, 5 de mayo de 2009

Los Remedios Florales: Medicina Humanista, del futuro y espiritual

La idea de salud como un estado de armonía y la idea
de la unidad de todas las cosas llevó a Edward Bach
a comprender que la salud del hombre debía encontrarse,
no a través de la destrucción de la Naturaleza sino en la
integración con ella. Preparó sus remedios, ya en los años
30, con un sentido ecológico, en el lugar donde las flores
se cortan, usando agua de la misma zona y para su preservación un alcohol natural.
Encontró que los remedios que el hombre necesita pueden hallarse en el "almacén de la
naturaleza" sin destruirla y sin recurrir a técnicas complicadas y costosas.
Los Remedios Florales no invaden con violencia la estructura del ser vivo sino que, actuando con delicada discriminación, dan el toque necesario para corregir el desequilibrio y lograr la armonía. Esta suave acción muestra el profundo respeto que Bach tenía por el hombre y por las energías esenciales creadoras.
La concepción trascendente del médico galés, coherentemente con la acción de sus flores, no lleva a una huida del hombre de su realidad, sino, por el contrario, a integrarse a ella para perfeccionarla, a través de la acción, del amor y de la libertad interior. Y es por estas razones que veo a la medicina de Bach como una medicina humanista.
También es una medicina del futuro, Porque hoy día,
cuando frente a patologías crónicas y severas, nos damos cuenta que debemos recurrir a otras medicinas mas groseras, para poder actuar sobre el cuerpo físico, imaginamos con Bach que llegará un día en que los hombres adquieran la suficiente lucidez como para percibir la enfermedad en el desajuste emocional inicial y poder entonces prescindir de los métodos cruentos que dominan la medicina contemporánea.
Se ha dicho de los Remedios Florales que constituyen una medicina espiritual. Así lo creo, porque al equilibrar las emociones a través del delicado toque de las flores, evitamos que nos invadan, evitamos la identificación con ellas y esto permite que nuestra conducta sea guiada por nuestros valores espirituales y no por las pasiones primarias que nos llevarán siempre y en última instancia al egoísmo y a la destrucción.
El avance humano se realiza a través de múltiples caminos. Bach lo hizo a través de sus flores. Médico y poeta. Y filósofo. Trabajador auténtico y cultivador del "Conócete a tí mismo" que nos recomendó Sócrates. Y visionario de una humanidad mejor a la que aportó la claridad, la fuerza y la nobleza de sus ideas en esta oscura encrucijada de la historia.

Posología

Tanto para los seres humanos como para las plantas y los animales, los Remedios Florales se preparan de la misma manera.
Se toma un frasco gotero de 30 gramos, se lo llena de agua mineral sin gas, o de agua común (en el caso de las plantas lo ideal es usar agua de lluvia), nunca se debe usar agua destilada ya que es agua muerta, se le agregan alrededor de 40 gotas de cognac o vinagre de vino (que tiene como objeto preservar el agua), y sobre este vehículo se colocan 2 gotas de cada remedio elegido. Si se usa el Rescue . Remedy, sea solo o combinado con otros, se deben colocar 4 gotas.
Como en todos los remedios que actúan por acción física y no química, la acción de los Remedios Florales no depende de la cantidad sino de la frecuencia de las tomas. Así de los medicamentos preparados como ya indiqué, la dosis a administrar será siempre la misma :4 gotas, coloca-das directamente en la boca del paciente. La frecuencia mínima será de 4 tomas diarias. Esto es 4 gotas, 4 veces por día. Esta es la forma de administración que recomienda el Centro Bach.
Pero mi experiencia me llevó a aumentar las frecuencias de las tomas de acuerdo a la gravedad o urgencia del cuadro. En los casos crónicos y de cierta gravedad suelo darlos de 6 a 8 tomas diarias. En los casos agudos, como el que presenté al hablar del Cherry Plum, suelo indicar 4 gotas a tomar cada 10 minutos durante la primera hora de tratamiento; cada 20 minutos durante la segunda hora; cada media hora durante la tercer hora, luego 4 gotas cada hora y voy espaciando la frecuencia de acuerdo a la respuesta del paciente. Si el paciente está inconsciente se colocarán las gotas entre los labios, atrás de la oreja o en las muñecas.

Los remedios florales en los animales y las plantas

Algunas personas se sorprenden al enterarse que es-tos medicamentos actúan sobre animales y plantas, Recordaré que los medicamentos de todas las medicinas actúan sobre ellos. Así hoy día es habitual dar hormonas a las plantas. Y los animales son medicados por los veteri-narios con tranquilizantes, corticoides y antibióticos como cualquier persona.
Al igual que en los seres humanos deberemos hacer con animales y plantas un diagnóstico emocional.
Esto no demasiado difícil ya que es común que usemos para
ellos las mismas palabras que definen las emociones humanas.
Si un animal está agresivo requerirá Holly. Si está excesivamente "mimoso" le daremos Heather. Si está muy activo y excitado, indicaremos Vervain.
Relataré un caso que ilustrará la conducta a seguir. Un gato adulto hizo un cuadro de parálisis del tren posterior por hipervitaminosis A causada por exceso en la ingesta de hígado. Es una enfermedad bastante común en los gatos por el hábito, en nuestro medio, de darles hígado,
como comida básica.
Indiqué Rescue Remedy, por el shock que la intoxica-I I6n produjo, Crab Apple para la intoxicación y pregunté al dueño cómo estaba el gato emocionalmente. Me contestó que estaba muy mimoso. Esto me sugirió Heather y lo agregué a los medicamentos anteriores. Preparé la fórmula en un frasco de 30 gramos sobre base de agua mineral, es decir exactamente como se prepara para una persona. De este frasco indiqué al dueño del animal que pusiera unas 10 ó 15 gotas en la leche o agua que el gato tomara. Alrededor de 3 horas después de tomar el medicamento, el gato pegó un salto sobre un mueble, la parálisis había desaparecido. El gato se curó definitivamente.
Un pajarito cantor se quebró una pata en sus revoloteos adentro de su jaula. Su dueña lo encontró caído y con evidentes signos de sufrimiento, en un rincón de la misma. Indiqué dar Rescue Remedy, colocando unas 4 gotas en el recipiente de agua y entablillar la pata enferma con un palillo. Una hora después el pajarito cantaba alegremente saltando sobre su pata sana.
En las plantas, el diagnóstico emocional puede ser un poco más complicado. Sin embargo solemos referirnos al estado de las plantas usando palabras que indican estados emocionales. Así decimos: esta planta está triste, o esta planta está muy castigada, etc. Esas palabras son las que nos deben guiar para la elección del medicamento apropiado.
Barnard indicó una fórmula combinada: HOV. Esto es Hornbeam + Olive + Vine. Los dos primeros son para dar vitalidad y la última para romper la semilla o que salgan nuevos brotes.
Si la planta está sufrida, indicaremos Agrimony, que es la flor para la tortura interna. Si ha sido trasplantada o ha recibido demasiada agua o sol, se interpretará como una situación de shock e indicaremos Star of Bethlehem. Si está apestada, le daremos Crab Apple, el remedio de la limpieza. Para dar vitalidad podemos recurrir, además de las que Barnard indicó, a Wild Oat o a Centaury.
Los medicamentos se administrarán a través del agua de riego o bien pueden fumigarse sus hojas con un aparato apropiado. Se prepara la fórmula elegida de la misma manera que se prepara para una persona.
De esa solución se extraerán dos cucharaditas tamaño té para disolver en 5 litros de agua y se regarán las plantas con la frecuencia habitual.
El buen conocimiento de los Remedios Florales y un poco de imaginación son las únicas condiciones requeridas para usarlos en las plantas.

Medicación por legos y automedicación

El ideal de Bach fue que, siendo este sistema médico tan simple, no teniendo las flores efectos colaterales y dado que si se comete un error en su prescripción no se provoca daño, según expliqué en el Capítulo VII, los Remedios Florales puedan ser usados por legos. Tanto es así que tituló su libro "Cúrese usted mismo".
No obstante, en la práctica, este ideal de Bach no se logra fácilmente. La automedicación exige un profundo conocimiento de sí mismo y la posibilidad de observarse sin identificarse con las propias emociones. Esto requiere obviamente un gran entrenamiento y estar en un determinado nivel evolutivo. No todos lo logran,
Recomiendo a los legos y a los que desean automedicarse, leer con atención los libros de Bach, seguir las cinco reglas básicas que expuse en el Capítulo V y asesorarse con un experto en el sistema Bach. Deben recordar así mismo que si bien la indicación de un medicamento equivocado no daña, crear expectativas y demoras en un tratamiento es dañino per se.

Aplicación de los Remedios Florales

Los Remedios Florales forman, como ya dije en la Introducción, un sistema médico que puede ser usado tanto en seres humanos como en animales y plantas.
Bach no era psiquiatra, practicaba la clínica médica, y cuando creó este sistema lo usó en todo tipo de enfermedades clínicas. Trataba así con sus flores enfermedades cardíacas, renales, etcétera, fueran de tipo infeccioso, degenerativo o de cualquier etiología. Se informaba de los signos físicos y establecía un diagnóstico, pero indicaba el medicamento según las emociones en desequilibrio que sufría el paciente, y esto curaba su dolencia física. Trataba al paciente y no a la enfermedad. Cuando ésta presentaba una localización, por ejemplo, una artrosis de rodilla, indicaba por boca la fórmula correspondiente, y la misma fórmula, en otra forma farmacéutica, pomada, loción, etc., en aplicación local. Personalmente he tenido algunas oportunidades de usar esta técnica en mi práctica privada y el resultado ha sido excelente. Dada mi formación psiquiátrica y psicoanalítica, he usado los Remedios Florales en mi trabajo en salud mental. La experiencia muestra que todos los cuadros psiquiátricos son pasibles de ser tratados con las flores aunque no en todos pueda usarse como única medicina.
Los casos agudos o los leves son, naturalmente los que más se benefician. Los casos crónicos, como en todas las medicinas, requieren un tratamiento prolongado, ya que, lo que en mucho tiempo se forma, necesita tiempo para modificarse, en estos casos suelo decir a mis pacientes que para este tratamiento se requieren dos cualidades: paciencia y constancia, y que deben tomar el remedio con la misma naturalidad y falta de expectativas con la que se lavan los dientes todas las mañanas.
En las psicosis, al igual que en ciertos cuadros orgánicos severos, las flores también actúan, pero siendo estos casos el producto de una alteración muy profunda de la personalidad, se requieren otras medicinas asociadas. Si bien podemos pensar que en tales casos, ya es demasiado tarde para actuar sobre el campo energético del paciente, conviene usarlos, pues pueden modificar la actitud del paciente frente a su enfermedad y, a veces, llegar a detenerla (ver Caso III del Capítulo VI).
En el área de la salud mental la asociación más común de los Remedios Florales es con la psicoterapia. Ciertos psicoterapeutas rechazan estos remedios, probablemente por falta de información, con la idea de que las flores pueden "tapar" conflictos o afirmando que la cura por la palabra es más "profunda". Me detendré en estas afirmaciones porque creo que derivan de una confusión.
La mayoría de las psicoterapias y especialmente las psicoanalíticas y orientadas psicoanalíticamente, que son las más habituales en nuestro medio, tienen como objetivo la ampliación del campo de la conciencia, "hacer consciente lo inconsciente", como dijo Freud. Si bien este fenómeno se daría concomitantemente con una modificación energética, lo que se expresa en cambios emocionales, en la práctica este objetivo no se logra tan frecuentemente como sería de esperar. Las razones son múltiples y complejas y no me propongo discutirlas aquí en extenso. Digamos que, en parte, derivan de la patología de nuestra época, tan diferente de la época de Freud. Hoy priman más las defensas del tipo de la disociación que las de la represión, siendo a mi juicio las primeras más difíciles de resolver a través de la palabra, que las segundas. Esto hace que la mayoría de los pacientes adquieran más un conocimiento intelectual, que una verdadera ampliación del campo de la conciencia con su lógico correlato emocional, es decir energético. Y cuando digo correlato emocional, no me refiero a la abreacción o descarga emocional sino a un cambio en la calidad de la emoción, como ilustra el caso que presenté en el Capítulo VIL
En estos casos la asociación de la psicoterapia con los Remedios Florales es utilísima, porque al actuar éstos en el plano energético, provocan modificaciones que aportan material inestimable para la tarea psicoterápica. Una de estas modificaciones se expresa en la afluencia de sueños que estos medicamentos provocan, sobre todo en los comienzos del tratamiento, lo cual es un índice de movilización "profunda" de la psique.
Un ejemplo clínico ilustrará mejor este tipo de acción.
La señora B., de 45 años, casada y madre de un hijo de 10 años, consulta por sentirse muy celosa y agresiva. Se ha analizado muchos años, primeramente en grupo y luego en análisis individual, del que fue dada de alta. Estas terapias fueron exitosas y le ayudaron a hacer cambios importantes en su vida. Indico Holly en la dosificación habitual de 4 gotas a tomar 6 veces por día. Alrededor de 10 días después de tomar la medicación me llama desesperada, se había orinado en la cama durante el sueño. Naturalmente esto le provocó una situación nada agradable con su esposo. A su pregunta de que si podía ser el efecto de los remedios, ya que nunca le había pasado una cosa así, le pregunto si había sido enurética de niña. Me responde afirmativamente, sufrió de enuresis hasta los 11 años. Pese a mis explicaciones de que ese "accidente" respondía a una movilización "profunda" y de antiguas estructuras patológicas y que iba a pasar, etc., etc., la paciente abandonó el tratamiento.
Queda claro entonces, que los Remedios Florales no "tapan" síntomas, ya que no provocan supresión por actuar en el substrato energético y pueden llegar a planos "profundos" y antiguos de la psique o más bien de la persona.
Otra posible y exitosa asociación terapéutica se da con la cirugía. Medicar con el sistema Bach a un paciente antes y después del acto quirúrgico asegura una estabilidad emocional cuyos resultados se observan en la pronta recuperación post-quirúrgica.
En el embarazo y parto las flores son el medicamento ideal. Harto sabidos son los riesgos de la medicina alopática en estos casos. Dada la especial sensibilidad que adquieren las mujeres en estas etapas de la vida, están más expuestas que nunca al desajuste emocional, desajuste que si no se corrige, incide obviamente en su propia salud y en la del hijo. En algunos casos, dando solamente el Rescue Remedy durante todo el embarazo, se logra un equilibrio que permite enfrentar el parto en condiciones ideales y con más razón aún si se prevé que el parto no será normal.
Es quizás en el campo pediátrico donde los Remedios Florales actúan más espectacularmente. El maleable organismo infantil lo hace buen receptor de las flores y de los cambios a los que ellas llevan. Se puede y se deberían dar desde el nacimiento. Colocado el Rescue Remedy en los pezones de la madre, el bebé incorpora el medicamento en cada mamada y éste actúa borrando las secuelas del traumatismo del parto y equilibrando al bebé en su alimentación y sueño. Si bien tengo poca experiencia en estos casos, el resultado siempre fue exitoso. Más adelante, en la vida del niño, el sistema Bach se puede usar en todo tipo de patología tanto como medicación única como asociado a otras medicinas, con excelente resultado.
Sería extenso e innecesario continuar detallando las diversas aplicaciones de este sistema médico. Cuando se comprende el mecanismo profundo y la ideología que subyace a él, se comprende por qué su uso es universal, lo que no quiere decir que sea perfecto, ya que las panaceas no existen.
Pero volvamos a Bach. Nos dice en su Introducción a "Los Doce Curadores". . .:
"Al ser la mente la parte más delicada y sensible del cuerpo, en ella aparecen la génesis y el curso de la enfermedad más claramente que en el resto del cuerpo, por lo que se utiliza la observación de la mente como guía para conocer qué remedio o remedios se requieren. En la enfermedad se da un cambio de humor en la vida diaria, y las personas observadoras pueden notar ese cambio incluso antes, y a veces mucho antes de que aparezca la enfermedad, y con un tratamiento se puede lograr prevenir la enfermedad".
Este párrafo nos lleva a entender el uso ideal de estas sencillas flores. Efectivamente, si podemos detectar el inicio de un estado patológico por el desequilibrio mental correspondiente, estamos en el mejor momento para iniciar la acción terapéutica a través de las flores y evitar así la cristalización del estado mental patológico que llevará a la patología orgánica.
Este sistema médico resulta entonces excelente para realizar medicina preventiva.
Así lo usaba Bach, quien recomendaba, según nos dice Nora Weeks, que con la misma naturalidad con que decimos "Tengo hambre, voy a prepararme una ensalada", debemos decir "Tengo miedo, voy a tomar Mimulus", o "Estoy muy intolerante, tomaré Beech".
Es evidente que para usar los Remedios Florales de esta manera se requiere, en primer lugar, un conocimiento sólido de los estados mentales que las flores corrigen, que se puede adquirir leyendo una y otra vez la descripción de Bach. En segundo lugar, un conocimiento profundo de nosotros mismos unido a una honestidad básica y un deseo de cambio y evolución.
Dice Hyne Jones en su "Diccionario de los Remedios Florales de Bach", que si se está viendo una película de horror por televisión y esto provoca miedo, se deberá tomar Rescue Remedy, pero además, se deberá apagar el televisor.
Esta sencilla recomendación nos muestra que si bien las flores nos pueden ayudar en todo momento a restablecer el equilibrio emocional perdido, debemos mantener una vida higiénica para preservar dicho equilibrio.
Sobre el cuidado de la mente y el cuerpo nos dice Bach : en "Cúrese usted mismo":
"Nuestros consejeros espirituales, médicos de verdad e íntimos amigos podrán ayudarnos a conseguir un buen retrato de nosotros mismos, pero el método perfecto de aprender es el pensamiento sereno y la meditación . . . Sólo con que podamos apartarnos un rato todos los días, perfectamente solos y en un lugar tranquilo, sin que nadie nos interrumpa, y sentarnos o tumbarnos tranquilamente, con la mente en blanco o bien pensando sosegadamente en nuestra labor en la vida, veremos después de un tiempo que esos momentos nos ayudan mucho y que en ellos tenemos como flashes de conocimiento y de consejo". Y respecto del cuidado del cuerpo:
"Sin llegar a identificarnos demasiado con nuestros cuerpos, debemos tratarlos con respeto y cuidado para que se mantengan sanos y duren más tiempo, a fin de que podamos realizar nuestro trabajo ... La limpieza interna y externa es de gran importancia. Para la limpieza externa, nosotros los occidentales utilizamos agua excesivamente caliente; ésta abre los poros y permite la admisión de suciedad. Además la excesiva utilización de jabón vuelve pegajosa la superficie. El agua fresca o tibia en forma de ducha o de baño renovado, es el.método más natural y mantiene el cuerpo más sano ... La limpieza interna depende de la dieta, y deberíamos elegir cosas limpias y completas y lo más frescas posibles, principalmente frutas naturales, verduras y frutos secas. Desde luego habría que evitar la carne animal; primero, porque provoca en el cuer-po veneno físico; segundo, porque estimula un apetito excesivo y anormal y tercero, porque implica crueldad con •I inundo animal. Debe tomarse mucho líquido para limpiar el cuerpo, como agua y vinos naturales y productos derivados directamente del almacén de la Naturaleza, evitando las bebidas destiladas más artificiales. El sueño no debe ser excesivo, ya que muchos de nosotros tenemos más control sobre el cuerpo cuando estamos despiertos que cuando dormimos, El antiguo dicho inglés "cuando llega la hora de darse la vuelta llega la hora de levantarse" es una excelente indicación de cuándo levantarse.
Las ropas deben ser ligeras de peso, tan ligeras como lo permiten el calor que den; deben permitir que el aire
traspase hasta el cuerpo, y siempre que sea posible hay que exponer el cuerpo a la luz del sol y al aire fresco. Los baños de agua y de sol son grandes fuentes de salud y vitalidad".
Así, cumplir estas normas higiénicas, preservarnos de los estímulos nocivos y recurrir a las flores al menor indicio de desequilibrio emocional, serían, para Bach las tres herramientas que deberíamos utilizar para estar en armonía.

Mecanismos de acción y efecto de las flores

Desde un punto de vista fisiológico, la hipótesis sobre el mecanismo de acción de los Remedios Florales, según dije en el Capítulo I, dice que la vibración de las flores actúa sobre las vibraciones del campo energético del ser vivo, armonizándolo.
Cada bloqueo o ruptura que se produce en los circuitos de energía se convierte en un desequilibrio emocional, que si perdura, da lugar a manifestaciones patológicas orgánicas. Cada flor, entonces, actuaría desbloqueando o "suturando'' esas lesiones, disminuyendo su acción a medida que el equilibrio se recupera.
Estos medicamentos actúan, por lo tanto, por acción física y no química como los de la medicina alopática tradicional.
Es por estas razones que los efectos que una persona medicada con las flores pueda sentir, no derivan rigurosamente de los medicamentos sino de la estructura de la persona, como si el remedio actuara por una suerte de catálisis.
Esto explica porqué cuando se prescribe un remedio floral erróneamente, no daña, ya que la vibración de la flor no actúa si la emoción correspondiente está en equilibrio. Esto hace, del sistema Bach, uno de los pocos sistemas médicos que puede ser usado por legos y permite la auto-medicación.
Veamos un ejemplo de las características individuales de la respuesta. Una persona deprimida por estar insatisfecha con su profesión es medicada con Wild Oat. La respuesta variará. En unos casos desaparecerá la depresión y el sujeto encontrará que se siente a gusto con lo que hace, "echa raíces", como dijo Bach. En otros el medicamento lo llevará a dejar lo que no le gustaba y elegir otra cosa. El medicamento ha restablecido el equilibrio energético alterado y, en consecuencia, ha estimulado al sujeto a una búsqueda en el amplio horizonte de la vida. La posibilidad de cambio estaba en el sujeto y no en el remedio.
En el Caso í que expuse en el Capítulo VI vimos que el Star of Bethlehem dió a la paciente mayor tranquilidad y sueño, cuando lo más común que se observa cuando se indica esta flor es una cierta excitación y euforia que llega, a veces, a provocar insomnio, lo que obliga a indicar otro medicamento.
En síntesis, todo cambio de tipo patológico que se observe durante un tratamiento con el sistema Bach no se debe a la acción directa del medicamento sino a movilizaciones del organismo en su proceso curativo. Estas reacciones se observan sobre todo con los remedios que corresponden a estados mentales caracterológicos o crónicos, por ejemplo: Chicory, Vine, Beech, Rock Water, Vervain, etcétera.
Una pregunta habitual que se formulan los médicos que se acercan al sistema Bach es cómo se verifica la acción de las flores. La contestación es simple : por la respuesta clínica. Indíquese Agrimony a una persona que siente angustia con opresión en el pecho y se observará a los pocos días la desaparición de la angustia. Y así con las demás flores.
Una objeción habitual que también hacen los médicos es que seguramente las flores actúan por sugestión.
Es muy sencillo descartar la hipótesis de la sugestión o efecto placebo en la acción de estos remedios. Basta darlos en animales y plantas y observar sus efectos para darse cuenta que no es la sugestión lo que está actuando. Lo mismo observaremos si damos a una persona en estado de inconsciencia Rescue Remedy o Clematis y vemos cómo vuelve al estado de conciencia.
Estas objeciones y cuestionamientos que se le hacen a los Remedios Florales tienen su origen, a mi entender, en que los seres humanos nos hemos olvidado, por un extraño trastrueque cultural, que las plantas han sido los medicamentos de la humanidad desde sus albores. Los remedios comunes de hoy día, en su mayoría, son sólo una copia hecha en el laboratorio de esos originales remedios vegetales. Por eso no hay que sorprenderse de que flores silvestres curen, así lo han hecho y lo seguirán haciendo mientras la vida continúe en este planeta.
Los Remedios Florales actúan entre las_3 horas y las 8 semanas de haber sido administrados. Si pasado ese plazo no se observan cambios en el estado del paciente, se puede considerar que el remedio no ha actuado.
Su efecto es muy suave, tanto, que el paciente mejora y no atribuye la mejoría al medicamento, tal el caso que cité al hablar de Aspen.
Pueden observarse además, algunos efectos interesantes específicos de estos remedios. Uno de ellos es la afluencia de sueños en los comienzos del tratamiento. Otro es el percatarse acerca de las propios proceso psíquicos, lo que ocurre espontáneamente y lleva a la persona a un cambio de conducta. Tal el caso que expuse al hablar de Oak,
Aquellas personas que han tomado ias flores asiduamente y por un tiempo prolongado, coinciden en afirmar que,además de los cambios personales que experimentaron según el cuadro que presentaba, se sienten más libres e independientes, con mayor capacidad para la acción en el mundo.
Pero volvamos a Bach y a sus ideas sobre la curación, ya que nos ayudará a comprender mejor como actúan sus treinta y ocho flores.
En el Capítulo VII de "Cúrese usted mismo" dice Bach :
"Y ahora llegamos al problema crucial: cómo mantener a nuestra mente y a nuestro cuerpo en ese estado de armonía que dificulte o imposibilite el ataque de la enfermedad, pues es seguro que la personalidad sin conflicto es inmune a la enfermedad ... Ya hemos discutido extensamente la necesidad de buscar en nosotros mismos los defectos que poseemos y que nos hacen actuar contra la unidad y sin armonía con los dictados del alma, y de eliminar esos defectos desarrollando las virtudes contrarias . . . Recordemos que, cuando se descubre el defecto, el remedio no consiste en luchar denodadamente contra él con grandes dosis de voluntad y energía para suprimirlo, sino en desarrollar firmemente la virtud contraria, y así, automáticamente desaparecerá de nuestra naturaleza todo rastro de mal. Este es el verdadero método natural de progresar y de dominar el mal, mucho más fácil y efectivo que la lucha contra un defecto en particular. Al combatir un defecto, se aumenta el poder de éste al mantener la atención centrada en su presencia, y se desencadena una verdadera batalla; el mayor éxito que cabe esperar en éste caso es vencerle, lo cual deja mucho que desear ya que el enemigo permanece dentro de nosotros mismos y en un momento de debilidad puede resurgir con renovados bríos. Olvidar el error y tratar conscientemente de desarrollar la virtud que aniquile a lo anterior, ésa es la verdadera victoria.
Por ejemplo, si existe crueldad en nuestra naturaleza, podemos repetirnos continuamente: no voy a ser cruel, y así, evitar errar en esa dirección. Pero el éxito en este caso de-pende de la fortaleza de la mente y si se debilita por un momento podemos olvidar nuestra resolución. Si, por otra parte, desarrollamos la compasión y el cariño por nuestros semejantes, esta cualidad hará que la crueldad sea imposible de una vez por todas, pues evitaremos el acto cruel con horrror gracias a la compasión. En este caso no hay supresión, no hay enemigo oculto que aparezca en cuanto bajamos la guardia, pues nuestra compasión habrá erradicado por completo de nuestra naturaleza la posibilidad de cualquier acto que pudiera dañar a los demás".
Estos párrafos nos muestran el énfasis que Bach ponía sobre la acción para lograr el cambio a través del cual se llegará a la curación. A través de la reflexión debemos detectar los rasgos a modificar y luego ejercer en acciones concretas la virtud contraria lo que nos llevará a la armonía y por ende a la curación.
Coherentemente con estas ideas, las flores, a través de su acción física, armonizan el desequilibrio emocional sin necesidad de actuar directamente sobre lo negativo.
Esto se me hizo claro durante el tratamiento de una paciente, de 34 anos, tratamiento combinado de flores y psicoterapia, lo que me permitió seguir sutilmente sus cambios emocionales. Le había indicado una fórmula compuesta de Chestnut Bud + Holly + Scleranthus + Chicory a tomar 4 gotas 8 veces por día. Al cabo de dos meses la paciente había hecho tal cambio emocional que me dijo : "Esto es más que un tratamiento, siento que estoy sufriendo una transformación. Estoy más buena, cariñosa con mi familia, más alegre, no me quedo atrapada en los pequeños inconvenientes de la vida cotidiana, estoy tranquila y contenta. Veo a mi madre distinta de como la veía antes y la comprendo mejor ..."
Es evidente que el amor, la alegría y la capacidad de comprensión estaban ya en la paciente. La desaparición de las ideas paranoides, de la actitud egoísta, de la incapacidad de entender la personalidad de la madre, etcétera que determinaron mi indicación de las flores, no se produjo porque se luchara contra ellas a través del diálogo psicoterápico, sino por que las flores enfatizaron, a través de un cambio energético, las "virtudes opuestas" que estaban en la paciente. De ahí la sensación de estar sufriendo una transformación, lo que era cierto.

Historias Clínicas: Una enfermedad incurable

El señor Mario H., divorciado, de 45 años, dibujante publicitario, es enviado por su neurólogo para tratarse con el sistema Bach, pues padece un cuadro depresivo. Desde hace un año se le ha diagnosticado una degeneración estríonígrica o quizás una degeneración cerebelosa tardía. Es imposible hacer el diagnóstico diferencial entre estas dos afecciones, duda que solamente se puede aclarar por medio de análisis anatomopatológico. Sea un cuadro u otro a los fines pronósticos no hay demasiada diferencia. Son enfermedades degenerativas, lentas y progresivas y que no responden a la medicación.
Eos primeros síntomas que relata el paciente fueron de pérdida de equilibrio y mareos, síntomas que se mantienen hasta el presente y lo llevan a un continuo movimiento de balanceo, habiendo sufrido varias caídas (Scleranthus).
Dice que la enfermedad se desencadenó después de una situación familiar que resultó muy traumática para él (Star of Bethlehem).
Este cuadro lo ha llevado a tal invalidez que se ha visto obligado a volver a vivir en la casa de sus padres. "Me sien-to inseguro (Larch), no tengo estabilidad y me caigo (Scleranthus)". Actualmente se siente deprimido por la situación de dependencia en la que se encuentra y a la que no estaba acostumbrado (Gentian). Siente rabia contra su familia (Holly) y sólo puede dormir tomando psicofárma-cos. Ha perdido el apetito. Tiene miedo de estar solo hasta para bañarse (Mimulus).
Observo que tiene dificultad en la articulación de la palabra.
Mario es divorciado, no tuvo hijos, vivía solo antes de su enfermedad y trabajaba como dibujante en una empresa de publicidad. Siempre estuvo satisfecho con su tarea, aparte de la cual, pintaba, habiendo hecho algunas exposiciones. Desde el comienzo de su enfermedad dejó la pintura y se ha visto obligado a abandonar su trabajo. Se define así mismo como una persona obsesiva, retraída y orgullo-sa. (Water Violet).
Es un hombre inteligente con inquietudes intelectuales.
Prescribo una fórmula compuesta de : Star of Bethlehem + Scleranthus + Mimulus + Holly, a tomar 4 gotas 6 veces por día.
Dos meses después se realiza la segunda entrevista. Mario dice sentirse mejor, no está deprimido, el miedo y la agresión contra su familia han desaparecido. Ha mejorado levemente su balanceo y no ha tenido caídas. Indico una nueva fórmula de Rescue Remedy + Scleranthus.
Dos meses después el neurólogo que hizo la derivación me informa que Mario ha hecho un gran cambio. Parientes y amigos están sorprendidos. No está deprimido. Tiene ganas de hacer cosas. Ha salido al cine y al teatro, tiene buen apetito y duerme bien. Se observa cierta mejoría en sus trastornos de equilibrio y mareos. Volvió su interés por la pintura y ha pintado dos cuadros.
Presento este caso para mostrar como los Remedios Florales, aún en una enfermedad tan severa y de mal pronóstico como la que padece Mario, son útiles, pues al equilibrar el estado emocional permiten al paciente hacer una vida independiente y tolerar mejor su dolencia incurable.
A pesar de la persistencia de los síntomas orgánicos, Mario pasó de estar deprimido y en un estado regresivo y dependiente, a manejarse con bastante independencia, a estar conectado con el mundo e, incluso, pudo recuperar su capacidad creativa y volver a la pintura.